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  • Carlos Collantes Díez

EL ÁGUILA Y LA TORMENTA

27 Junio 2016 23029

 

¿Sabías que un águila sabe cuándo una tormenta se acerca mucho antes de que empiece? El águila volará a un sitio alto para esperar los vientos que vendrán.

Cuando llega la tormenta, extiende sus alas para que el viento las agarre y lo lleve por encima de la tormenta. Mientras que la tormenta esté destrozando abajo, el águila vuela por encima de ella.

El águila no se escapa de la tormenta. Simplemente usa la tormenta para levantarse más alto. Se levanta por los vientos que trae la tormenta.

Cuando las tormentas de la vida nos vienen  -y todos nosotros vamos a pasar por ello- podemos levantarnos por encima poniendo nuestras mentes y nuestra fe hacia Dios. Las tormentas no tienen que pasar sobre nosotros. Podemos dejar que el poder de Dios nos levante por encima de ellas. Dios nos permite ir con el viento de la tormenta que trae enfermedad, tragedia, y demás cosas en nuestras vidas. Podemos volar sobre la tormenta.

Para reflexionar y orar.

El Señor, a través del profeta Isaías nos dice: “… los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, echan alas como las águilas, corren sin cansarse, marchan sin fatigarse”. (Isaías 40, 31).

“Descargad en Él todo vuestro agobio que Él se interesa por vosotros”. (I Pedro 5, 7)

Lee Mateo 14, 24-33. Jesús caminando sobre las aguas, sobre la tormenta. Pedro quiere y cuando deja de mirar a Jesús y se fija únicamente en las dificultades, “en la fuerza del viento”, se hunde…

“Deja todas las cargas en las manos de aquel que puede con todo, y nunca mires atrás nostálgico”. Rabindranath Tagore

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