Bengala dorado lo ha llamado su hijo más famoso, el poeta Tagore. Bengala desastroso es la etiqueta que le ha puesto el periodismo de hoy. La evangelización de este País ha comenzado con las misiones entre los portugueses por parte de los Dominicos, Jesuitas y Agustinos a partir del siglo XVI. En 1947 Pakistán se independizó de la India y Bangla Desh era la parte oriental de esta nueva nación.

 

La Iglesia se adaptó a la nueva situación creando nuevas circunscripciones eclesiásticas. En 1971, con la guerra de independencia, Bangla Desh se separó de Pakistán formando un estado libre e independiente. El 86% de su población es de religión musulmana. Insistentemente requeridos por la Santa Sede para abrir aquí un campo de misión, los Javerianos, del 1952 a hoy, han empleado un centenar de misioneros entre padres y hermanos.

 

Alguno ha terminado sus días agotado por las fatigas. Algún otro, víctima del odio, ha merecido la corona del martirio. Hasta sus tumbas llegan los cristianos del lugar, agradecidos por el bien recibido, orgullosos de su testimonio y seguros de poder contar con ellos como intercesores en el Cielo. Cuarenta años de trabajo: el lento crecer de la nada de una misión, el sufrido sobrevivir de la flor de la paz entre tormentas de guerra.

 

Un País prácticamente sin recursos excepto su capacidad emprendedora y una gran paciencia para luchar cada día por la vida. Después de años de trabajo misionero Bangla Desh tiene hoy su clero local, religiosos y religiosas y numerosos catequistas procedentes de las numerosas comunidades cristianas que han ido naciendo. A lo largo de los innumerables cursos de agua, de vez en cuando, entre la vegetación de las orillas se ve una cruz, aparece un pequeño campanario, se distingue un grupo de casas o de cabañas con la iglesia, la escuela, un dispensario o, en los centros más importantes, un hospital. Son los signos de la presencia de la misión. Los Javerianos, unos cuarenta en Khulna y otras diócesis, esperan poder seguir por mucho tiempo trabajando para que este pueblo siga creciendo y dilatando sus perspectivas misioneras.

 

 

 

 

 

Superficie : 144.000 km2

Población : 148 mill. hab.

Densidad : 926 hab/km2

Capital : Dacca

Moneda : Taka (BDT)

Idiomas of. : Bengalí

PIB : $ 206.658 millones (49º)

PIB per cápita : $ 1.299

Dominio Internet : .bd